Todas en algún momento de nuestras vidas nos hemos preguntado ¿Quién soy en realidad? Y buscamos en todos lados una identidad que solo encontramos en nuestro manual de vida, la Biblia. En este post quiero juntas estudiemos quiénes somos según la Biblia, no dejes de leer.
Aquí encontrarás
Somos creación de Dios
Primero que nada, somos creación de Dios, fue Él quien nos formó (Génesis 1:27). En el jardín del Edén todo era perfecto, no existía el pecado. Sin embargo, Adán y Eva pecaron, desobedecieron a Dios, así que esto nos llevó al destierro del paraíso. Es por eso que debemos reconocer también el siguiente punto.
Somos pecadores
Para reconocer también nuestra identidad debemos entender que todos hemos pecado, en Romanos 3:23 dice «Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios.» Esa meta gloriosa es el cielo, nadie puede estar con Dios porque todos hemos pecado.
Necesitamos a Jesús
Pero si seguimos leyendo, el versículo 24 nos dice «Sin embargo, en su gracia, Dios gratuitamente nos hace justos a sus ojos por medio de Cristo Jesús, quien nos liberó del castigo de nuestros pecados.» ¡Qué maravilla! Jesús vino a este mundo, fue perfecto, nunca pecó y gracias a Él tenemos salvación. Por eso ahora podemos dar respuesta a ¿Quién soy? Con que somos PERDONADAS.
Puedes leer más acerca del amor que Jesús nos da haciendo click abajo.
De pecadoras a hijas
La verdad es que saber que somos pecadoras nos hace sentir mal, y es por eso que necesitábamos tanto a un Salvador, fue gracias a Jesús que ahora somos limpias de pecado. Cuando tú le entregas tu corazón a Jesús para que lo limpie, Él te da una nueva identidad, la identidad de HIJA DE DIOS.
No hay mayor privilegio que este, en Gálatas 3:26 dice «Pues todos ustedes son hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús.» Al ser hijas de Dios tenemos nueva identidad, una nueva vida, privilegios y también responsabilidades ¿Quién soy? Ahora eres adoptada por Dios como su hija.
Lee un estudio del libro de Romanos acerca de la adopción como hijos de Dios haciendo click abajo.
Nuestra nueva identidad como hijas de Dios
¿Quién soy? Ahora después de haber aceptado a Jesús como tu Salvador, eres una hija de Dios, pero ¿Qué conlleva el ser hija de Dios? Este es un listado de quiénes somos al ser hijas de Dios.
1. Nueva criatura, nueva persona
Cuando somos adoptadas por Dios, nuestro pasado queda atrás, Dios no lo recuerda nunca más ¡Nos da un nuevo comienzo! En 2 Corintios 5:17 dice «Esto significa que todo el que pertenece a Cristo se ha convertido en una persona nueva. La vida antigua ha pasado; ¡una nueva vida ha comenzado!» No sé si a ti, pero a mi me emociona tanto ese versículo.
Si aún no te queda muy clara la respuesta a ¿Quién soy? Te dejo lo que dice Colosenses 2:13-14 «Ustedes estaban muertos a causa de sus pecados y porque aún no les habían quitado la naturaleza pecaminosa. Entonces Dios les dio vida con Cristo al perdonar todos nuestros pecados. Él anuló el acta con los cargos que había contra nosotros y la eliminó clavándola en la cruz.»
2. Fuimos creadas para alabar
¡Ahora tenemos entrada al Padre para poder adorarle! Dios nos creó para poder recrearnos en alabar Su Nombre. En Efesios 1:5-6 nos dice que alabamos a Dios en forma de agradecimiento por tanta gracia que nos ha dado y porque ahora le pertenecemos a Jesús, somos de Él ¿Quién soy en Jesús? Una adoradora de Dios.
3. Ahora pensamos y actuamos como Jesús
En 1 Corintios 2:16 se nos dice que ahora tenemos la mente de Cristo. Esto quiere decir que ahora nosotros no actuamos como en nuestra vida pasada, sino más bien, ahora actuamos como actúa Cristo, según sus estatutos.
No podemos decir que somos sus hijas si no le obedecemos, es por eso que es tan importante que leamos la Biblia, para conocer cómo debemos actuar. Ahora podemos decir que somos imitadoras de Cristo Jesús.
4. Ahora producimos fruto del Espíritu Santo
Cuando comenzamos a actuar como Jesús, el Espíritu Santo pone en nosotros lo que la Biblia llama fruto y nos indica que alejados de Jesús nada podremos hacer (Juan 15:1-5). Los frutos del Espíritu son: amor, alegría, paz, paciencia, gentileza, bondad, fidelidad, humildad y control propio (Gálatas 5:22-23) ¡Dios nos hace libres de la tristeza, amargura, dolor, rencor y de más! Ahora somos personas libres, que producen fruto.
5. Ahora entendemos que estamos de paso en la tierra
Cuando eres hija de Dios, entiendes que hay un plan mucho mayor que los planes que tienes para tu vida. Entiendes que Dios ha estado desde el principio y estará hasta el fin, que Él es el protagonista de toda la historia. Por eso sabemos que nuestro paso por la tierra es transitorio, que es Dios a quien debemos darle toda la gloria siempre. Te explico mejor esto en este post. Es por eso que decimos que ahora somos embajadoras de Cristo.
6. Somos luz y sal
En Mateo 5:13-16 dice nosotras somos la sal y la luz de la tierra, por lo tanto debemos dejar brillar esa luz (que es Jesús) para que todos puedan verlo y así le den gloria a Dios. Además nos llama a contarle al mundo acerca de esta buena noticia, por lo que nosotras, como hijas de Dios, debemos siempre hacer misiones.
7. Somos aroma agradable a Dios
Dios nos compara como un aroma agradable para Él. Todas nos sentimos halagadas cuando nos dicen que olemos muy bien, Dios nos halaga diciendo que somos un perfume que a Él le gusta. En 2 Corintios 2:14-15 nos dice que somos como un fragante perfume que sube hasta Dios.
8. Somos vencedoras gracias a Jesús
Dios nos da la fuerza para continuar en medio de las pruebas, un versículo muy conocido nos dice «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.» Filipenses 4:13
Dios nos ha dado la victoria por medio de Jesús, ya no somos condenadas a muerte eterna, Dios ganó nuestra batalla ¿Quién soy? Soy una persona vencedora gracias a Jesucristo.

Autora: Becky Jerónimo
Apasionada por Jesús, a Su servicio hasta que todos le conozcan. Fundadora de Soy Joven Cristiana. Desde Guatemala busca contribuir a redimir el diseño de Dios para las mujeres jóvenes.
Excelente post amada Dios te bendiga